miércoles, 31 de agosto de 2011

Para iniciar...

Fotografía de Nehiver Carrión, abril 2011
Mompiche - Ecuador
Hay ocasiones en que todo a nuestro alrededor parece tornarse obscuro, parecería que no existe la posibilidad de ver la luz...

No se sabe cuánto tiempo podrá durar esa obscuridad y qué es lo que puede pasar cuando la penumbra, imponente en nuestro ser, fulmina hasta el último soplo de esperanza... 

Es entonces que resulta imperante recordar, que más allá de esa obscuridad hay una luz que tarde o temprano saldrá y calentará nuestro ser, acogiéndonos, calmándonos, tranquilizándonos y diciéndonos: ya pasó, ahora hay que continuar y continuar para estar mejor...


2 comentarios:

  1. Que exactas tus palabras. Todos debemos recordar que siempre hay una "luz", la cual nos ilumina al final de nuestro camino. Cuando por cualquier circunstancia se nos presenta un inconveniente en nuestras vidas, sòlo hay una persona en la cuàl debemos confiar; y esa persona es "DIOS". el que te espera con los brazos abiertos para confortarte y brindarte su amor eterno, solo olvida el pasado y sígue confiado en sus promesas…

    Quiero felicitarte por tu blog me encanta.

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  2. Gracias Mireya:
    Así es, para quienes son creyentes en un Dios, sin importar la religión, ahí está la respuesta para tomar fuerzas y seguir adelante; sin embargo, hay momentos en que también es necesario buscar ayuda profesional para poder enfrentar ciertas circunstancias que sobrepasan cualquier entendimiento y fortaleza, lo importante es confiar en que esa situación, cualquiera que sea, pasará y dejará aprendizajes que cada uno decidirá cómo aplicarlas a su propia vida.

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